MÉTODO DRI
DETOXIFICACIÓN REGENERATIVA INTEGRAL
El origen de enfermedades y patologías en occidente ha cambiado en las últimas décadas. La medicina convencional ha evolucionado en campos como la traumatología, cirugía, infecciones, trasplantología.
Sin embargo, estamos en la era de las dolencias crónicas y degenerativas, patologías digestivas, enfermedades autoinmunes, desequilibrios hormonales a edades cada vez más tempranas, y se prevé que en unas décadas la mitad de la población tenga que pasar por un cáncer a lo largo de su vida.
El medio tóxico en el que vivimos no tiene precedentes, junto con la pérdida de nuestros principios fisiológicos, nos llevan a la enfermedad. Nuestras células enferman por tóxicos y malos hábitos. Nuestros órganos son incapaces de eliminar la cantidad de tóxicos a los que estamos expuestos.
No escuchamos los pequeños síntomas que nuestro organismo nos envía. En un intento de mantener el equilibrio se producen muchas patologías, cuyo tratamiento segmentado acaba derivando en problemas cada vez más complejos y que afectan a diferentes órganos y sistemas.
La salud celular y su entorno, donde se producen la mayor parte de las reacciones químicas y fisiológicas, son los pilares de nuestra salud. El motivo de que nuestra estructura elemental fisiológica esté enferma, es el exceso de toxicidad y la incapacidad de nuestro organismo para afrontar esta toxemia.
El Método DRI ofrece un reinicio de todas nuestras funciones metabólicas, a través de la adopción de hábitos saludables, la alimentación terapéutica, la mejora de las funciones orgánicas y la detoxificación profunda de todos los sistemas y órganos. El orden en el que se optimizan y limpian nuestros órganos depurativos es esencial para evitar la recirculación de toxinas.
El MÉTODO DRI es más que un programa de detoxificación, es un reseteo de todas nuestras funciones metabólicas, abordado desde los hábitos, la alimentación, la mejora de las funciones orgánicas, y la detoxificación profunda de todos los sistemas y órganos. El objetivo: devolver a nuestro organismo su capacidad innata de autoregeneración.
DRI es una metodología completa de salud integral y regenerativa que integra los métodos más avanzados en detoxificación, precisión diagnóstica y herramientas de regulación fisiológica. Métodos no invasivos, pero que requieren un profundo conocimiento de la biología humana, de los procesos curativos y enfermedad y de su aplicación terapéutica.
Todos los sistemas por orden que se trabajan en el MÉTODO DRI:
1. SISTEMA NERVIOSO
Una de las bases del método es activar el lado del sistema nervioso que facilita la detoxificación, el parasimpático.
La mayoría de la gente está en una continua sobreexcitación del sistema nervioso simpático.
Esto lleva a la inactividad del nervio vago, nervio que interviene en los procesos digestivos, regeneración, detoxificación. Es el nervio que comunica nuestro intestino con el cerebro.
Tanto los hábitos de regulación de ritmos circadianos, como la complementación de magnesio, potasio, adaptógenos como la Ashwagandha o la Rodhiola son de gran ayuda.
El Método DRI utiliza estas herramientas adaptadas a cada caso y situación.
2. APARATO DIGESTIVO E INTESTINO
Una mucosa digestiva deteriorada, hará que se reabsorban y vuelvan a la circulación los tóxicos que estemos eliminando. Para una mucosa sana, debemos repararla activando las funciones digestivas y sellando el exceso de permeabilidad intestinal. Esta reparación de la mucosa incluye la del estómago.
Aquí se requiere de un abordaje nutricional más la toma de complementos que apoyen la función gástrica, como la betaína, y el uso de complementos que reparen la mucosa gastrointestinal, como la glutamina.
Parásitos, exceso de cándidas deben ser tratados para completar esta reparación y recuperar el equilibrio bacteriano intestinal. Debemos realizar un protocolo personalizado con aceites esenciales y complementos que debiliten el biofilm con el que se protegen estos parásitos.
El método DRI aporta protocolos personalizados completos para realizar un completo reset intestinal.
3. HÍGADO Y RIÑONES
El hígado es el órgano que se encarga de metabolizar y eliminar tóxicos. También metaboliza medicamentos para que su principio activo sea utilizado. Las hormonas deben ser transformadas y eliminadas en el hígado.
Todo pasará por este filtro, que requiere de una función óptima. Una parte de los tóxicos filtrados irán a través de la bilis al intestino para ser eliminados en las heces, y la otra a los riñones para ser eliminados a través de la orina.
Esta detoxificación se hace con un dieta especial depurativa hepática y complementos dependiendo de si el problema es de activación de ácidos biliares, de detoxificación o de ambos.
Aquí, entre otros complementos, utilizamos desmodium, silimarina, rábano negro.
Los riñones deben tener una buena capacidad de eliminación, o los tóxicos no serán expulsados por esta vía.
Para la correcta función renal hay muchas plantas que se utilizarán, dependiendo de si queremos un efecto más diurético, reducir inflamación o facilitar la eliminación de cálculos.
La hidratación y el equilibrio electrolítico es otro de los objetivos de la optimización renal.
El Método DRI realiza la depuración de estos dos órganos al tiempo. Una depuración hepática requiere de una correcta función renal, y viceversa.
4. LOS OTROS SISTEMAS DE DETOXIFICACIÓN
Este sería el último paso antes de abordar una limpieza de metales pesados. Es importante mejorar la función detoxificadora de nuestro sistema linfático, respiratorio y de la piel. Son órganos complementarios, que facilitarán la salida de metales pesados y otros tóxicos.
El sistema linfático desempeña un papel vital en la detoxificación del cuerpo. Sus principales funciones detoxificadoras son:
Drenaje de Líquidos: Recoge el exceso de líquidos, junto con toxinas y productos de desecho, de los tejidos corporales y los devuelve al torrente sanguíneo.
Filtración de Toxinas: Los ganglios linfáticos actúan como filtros que capturan y destruyen patógenos, como bacterias y virus, así como células dañadas y otras sustancias tóxicas.
La piel es el órgano más grande del cuerpo y tiene varias funciones detoxificadoras importantes:
Transpiración: A través del sudor, la piel elimina toxinas, como metales pesados y productos de desecho metabólico.
Barrera protectora: La piel actúa como una barrera física que impide la entrada de sustancias tóxicas y patógenos.
El sistema respiratorio también juega un papel en la detoxificación del cuerpo:
Eliminación de CO2: A través de la respiración, el cuerpo elimina a través del dióxido de carbono (CO2) los productos de desecho metabólicos celulares
5. ELIMINACIÓN DE METALES PESADOS
La Detoxificación Regenerativa Integral (DRI) tiene en cuenta:
- La naturaleza individual de cada persona. No hay un tratamiento genérico que pueda servir a todo el mundo. Se debe siempre hacer un estudio personalizado y aplicar correctamente métodos de diagnóstico.
- Conocimiento global de cómo funciona el organismo e interrelación de los sistemas, las diferentes patologías y síntomas provocados por tóxicos.
- Realizar depuraciones de todos los órganos y sistemas (s. nervioso, intestino, riñón, hígado, sangre, s. linfático, respiratorio, piel…) en el orden adecuado y con la preparación necesaria para que sean efectivos y sin riesgo.
- Tenemos la absoluta capacidad de autocuración y podemos, con las herramientas adecuadas, devolver al organismo esta condición.
- Debe abordarse desde todos los diferentes terrenos, alimentación, complementación, hábitos, gestión del estrés, equilibrio del sistema nervioso.